Esta colonización comercial cambió drásticamente a partir del protagonismo alcanzado por los cartaginenses tras la caída de las metrópolis fenicias ante el imperio persa (siglo VI a. Este género, cultivado por muchos otros pintores, fue especialmente protegido por los encargos de instituciones y los concursos académicos, con lo que es sin duda el más destacado a lo largo de todo el siglo XIX. Remedios Varo fue sin duda uno de los máximos exponentes de la pintura española surrealista.